Una tarde con Paco Martínez Soria

SÁBADO 17 DE AGOSTO
19:00 horas – Teatro Bellas Artes

LA CIUDAD NO ES PARA MÍ
Eduardo Fajardo en el recuerdo

La noticia del fallecimiento de Eduardo Fajardo coincidió con la de Arturo Fernández. Mala suerte para la memoria del gallego con alma riojana, que quiso pasar sus últimos años en Almería, donde tantos westerns rodara y que por esas cosas de la vida la fue a entregar en México. Porque el asturiano era mucho más popular, claro, y había hecho mucha televisión y consiguió llegar al fin de sus días subido a un escenario, como él siempre quiso. Pero curiosamente a los del Festival nos causó igual o mayor impacto la desaparición de Fajardo por la sencilla razón de que una vez —y no una cualquiera— su carrera se cruzó con la de nuestro Don Paco.

Cuando el actor tenía 42 años y ya atesoraba una larga y fructífera carrera a sus anchas espaldas, tanto en cine como en teatro y televisión, interpretó el papel de hijo de Agustín Valverde en La ciudad no es para mí. Nuestro paisano era veintidós años mayor que Eduardo y seguramente fue contratado por su fama de solvente, amén de la impecable presencia que solía mostrar ante las cámaras.

Porque Fajardo tenía buen porte, le sentaban muy bien los trajes y disponía de una excelente voz. De hecho en sus últimos años laborales dobló a otros en más de una ocasión. Ni que decir tiene que esa película representó un momento importante en las carreras de ambos. Más determinante para Don Paco, que comenzaría con ella la segunda parte de la suya con el éxito que todos conocemos.

La ciudad no es para mí Eduardo Fajardo

No volvieron a reunirse ambos en el cine, pero por aquellas fechas no le faltó el trabajo al ahora fallecido. Buen número de lo que se acabó por conocer como spaghetti westerns le tuvieron en su reparto. Daba muy bien como ranchero, banquero o sheriff. Como botón de muestra cabe recordar que estaba en el reparto de Django, convertida con el tiempo gracias a Tarantino casi en objeto de culto.

Eduardo Fajardo participó en más de 180 películas, docenas de obras de teatro y cientos de programas de televisión. Cuando era joven se le pudo ver en títulos señeros de aquel cine español de fastos históricos, como Alba de América, La leona de Castilla o Agustina de Aragón o de cine religioso como Balarrasa. Fue de esa estirpe de buenos actores llamados de reparto que ennoblecían con su buen hacer los elencos de nuestro cine.

Como tuvo la mala suerte de elegir mal su día de deceso, esperamos que este modesto recuerdo del Festival de Cine de Tarazona y el Moncayo le sirva de justicia histórica, en agradecimiento a haber compartido

FERNANDO GRACIA

 

La ciudad no es para mí (1966). Dirección: Pedro Lazaga. Guion: Vicente Coello, Fernando Ángel Lozano (pseudónimo de Fernando Lázaro Carreter) y Pedro Masó. Música: Antón García Abril. Fotografía: Juan Mariné. Protagonistas: Paco Martínez Soria, Doris Coll, Cristina Galbó, Eduardo Fajardo, Rafael Alcántara, Manolo Gómez Bur, Cassen, Sancho Gracia, Alfredo Landa, Gracita Morales, María Luisa Ponte, José Sacristán, José Sazatornil, Manuel Tejada, Luis Varela